Hace un par de años, en el verano de 2010, dio comienzo un nuevo programa arbitral promovido por UEFA. Hasta ahora teníamos el programa de Talentos y Mentores, del que ya he hablado varias veces en este blog, para árbitros con categoría FIFA. Habitualmente este programa es para árbitros jóvenes y prometedores, aunque alguna vez se les ha colado algún cuarentón. Prometedor, eso sí.
Este nuevo programa, el CORE, toma su nombre del Centre of Refereeing Excellence de UEFA, un nuevo centro de educación arbitral creado por UEFA en enero de 2010. El programa CORE consiste en que todas y cada una de las 53 federaciones europeas envían a un árbitro y a dos árbitros asistentes para que participen en un curso introductorio, en verano. ¿Cuál es, entonces, la diferencia con el programa de Talentos? Pues que en CORE los árbitros no son internacionales. Son árbitros muy jóvenes, estos sí, que estén entre los 25 y los 30 años y cuyas federaciones consideren que tienen un buen potencial para alcanzar la categoría de internacional.
En este curso introductorio, que dura dos semanas, se hace lo que normalmente hacen sus mayores: preparación de partidos, gestión de jugadores, control del juego, aspectos tácticos y entrenamiento físico. Todo esto apoyado por los instructores UEFA que normalmente trabajan en los encuentros de Talentos, de árbitros Elite, etc. A la cabeza de todo está Yvan Cornu, antiguo mandamás de los árbitros europeos hasta la llegada de Pierluigi Collina y al que ha habido que buscar un nuevo despacho para que pueda pasar los inviernos suizos. Junto a él trabajan como instructores jefe el holandés Jaap Uilenberg y el inglés David Elleray, muy conocidos por los seguidores del arbitraje europeo.
Tras este curso introductorio se sigue la trayectoria del árbitro y de los asistentes seleccionados, que deben pitar partidos de categoría nacional en sus respectivas ligas. Tras siete meses de seguimiento, se les vuelve a convocar a un curso de consolidación, donde se estudia el progreso de cada árbitro. Al final de cada promoción se otorga un diploma a los colegiados que hayan alcanzado los objetivos fijados por los profesores.
He dicho al principio que en este programa participan árbitros de toda Europa y, hasta que las empresas de calificación quieran, España tiene la suerte de seguir en ella. En la primera edición del programa CORE, nuestros representantes fueron el extremeño Jesús Gil Manzano, como árbitro, y Ángel Nevado Rodríguez (extremeño) y Miguel Martínez Munuera (valenciano), como asistentes. Extraña elección de colegiados, hasta que pensamos en las condiciones de la convocatoria: colegiados con una edad entre 25 y 30 años. Y de esos, lamentablemente, hay muy pocos en primera división. De esta primera hornada, solo el valenciano Martínez pertenece a la máxima categoría del fútbol español. Los extremeños arbitran en segunda división.
La segunda edición comenzó en el verano de 2011 con nuevos representantes españoles. En este caso, el árbitro es el valenciano Juan Martínez Munuera, y los asistentes, los también valencianos David Canales Cerdá y Sergio Chinchilla Ortega, que forman trío arbitral en la segunda división española.
Releyendo lo que he escrito me asaltan varios comentarios. Una condición importante para participar en este programa es tener, según la federación respectiva, posibilidades reales de llegar a la categoría de internacional. Y como es esa misma federación la que propone a los internacionales... Vamos, que muy mal lo tienen que hacer a partir de ahora Gil Manzano y Martínez Munuera para que no les veamos con la escarapela de aquí a unos pocos años. Previo ascenso a primera, claro, que ya estamos llegando a las fechas de las quinielas.
Otro dato que me hace gracia, ya veréis por qué, es la elección el primer año de Miguel Martínez Munuera y en el segundo año de Juan Martínez Munuera. Valencianos los dos, hermanos los dos... ¿Os imagináis la cara de los instructores cuando se presente Martínez Munuera, que se supone que se graduó en la promoción anterior...?
El último dato ya no es de risa, sino para que algunos piensen en lo que están haciendo o, mejor aún, en lo que no están haciendo. De los seis seleccionados en estas dos ediciones, cuatro son valencianos. A lo mejor tiene algo que ver que en los últimos años son el comité más potente en cuanto a los ascensos de colegiados a 2.ª B. Bueno, este dato no tiene mucho que ver, sino que demuestra que el comité valenciano está trabajando muy bien con la base, por lo que suben con mucha suficiencia a 2.ª B y llegan a la élite muy buenos árbitros. Ya podía el señor Miller Andrés preparar un dosier sobre su forma de trabajar para entregar dentro de 15 días en Logroño a sus colegas presidentes de comités territoriales. Que la Comisión de Coordinación Interterritorial no tiene por qué ser solo una reunión con el alcalde (o alcaldesa), una foto y una comilona.
Este nuevo programa, el CORE, toma su nombre del Centre of Refereeing Excellence de UEFA, un nuevo centro de educación arbitral creado por UEFA en enero de 2010. El programa CORE consiste en que todas y cada una de las 53 federaciones europeas envían a un árbitro y a dos árbitros asistentes para que participen en un curso introductorio, en verano. ¿Cuál es, entonces, la diferencia con el programa de Talentos? Pues que en CORE los árbitros no son internacionales. Son árbitros muy jóvenes, estos sí, que estén entre los 25 y los 30 años y cuyas federaciones consideren que tienen un buen potencial para alcanzar la categoría de internacional.
En este curso introductorio, que dura dos semanas, se hace lo que normalmente hacen sus mayores: preparación de partidos, gestión de jugadores, control del juego, aspectos tácticos y entrenamiento físico. Todo esto apoyado por los instructores UEFA que normalmente trabajan en los encuentros de Talentos, de árbitros Elite, etc. A la cabeza de todo está Yvan Cornu, antiguo mandamás de los árbitros europeos hasta la llegada de Pierluigi Collina y al que ha habido que buscar un nuevo despacho para que pueda pasar los inviernos suizos. Junto a él trabajan como instructores jefe el holandés Jaap Uilenberg y el inglés David Elleray, muy conocidos por los seguidores del arbitraje europeo.
Tras este curso introductorio se sigue la trayectoria del árbitro y de los asistentes seleccionados, que deben pitar partidos de categoría nacional en sus respectivas ligas. Tras siete meses de seguimiento, se les vuelve a convocar a un curso de consolidación, donde se estudia el progreso de cada árbitro. Al final de cada promoción se otorga un diploma a los colegiados que hayan alcanzado los objetivos fijados por los profesores.
He dicho al principio que en este programa participan árbitros de toda Europa y, hasta que las empresas de calificación quieran, España tiene la suerte de seguir en ella. En la primera edición del programa CORE, nuestros representantes fueron el extremeño Jesús Gil Manzano, como árbitro, y Ángel Nevado Rodríguez (extremeño) y Miguel Martínez Munuera (valenciano), como asistentes. Extraña elección de colegiados, hasta que pensamos en las condiciones de la convocatoria: colegiados con una edad entre 25 y 30 años. Y de esos, lamentablemente, hay muy pocos en primera división. De esta primera hornada, solo el valenciano Martínez pertenece a la máxima categoría del fútbol español. Los extremeños arbitran en segunda división.
La segunda edición comenzó en el verano de 2011 con nuevos representantes españoles. En este caso, el árbitro es el valenciano Juan Martínez Munuera, y los asistentes, los también valencianos David Canales Cerdá y Sergio Chinchilla Ortega, que forman trío arbitral en la segunda división española.
Releyendo lo que he escrito me asaltan varios comentarios. Una condición importante para participar en este programa es tener, según la federación respectiva, posibilidades reales de llegar a la categoría de internacional. Y como es esa misma federación la que propone a los internacionales... Vamos, que muy mal lo tienen que hacer a partir de ahora Gil Manzano y Martínez Munuera para que no les veamos con la escarapela de aquí a unos pocos años. Previo ascenso a primera, claro, que ya estamos llegando a las fechas de las quinielas.
Otro dato que me hace gracia, ya veréis por qué, es la elección el primer año de Miguel Martínez Munuera y en el segundo año de Juan Martínez Munuera. Valencianos los dos, hermanos los dos... ¿Os imagináis la cara de los instructores cuando se presente Martínez Munuera, que se supone que se graduó en la promoción anterior...?
El último dato ya no es de risa, sino para que algunos piensen en lo que están haciendo o, mejor aún, en lo que no están haciendo. De los seis seleccionados en estas dos ediciones, cuatro son valencianos. A lo mejor tiene algo que ver que en los últimos años son el comité más potente en cuanto a los ascensos de colegiados a 2.ª B. Bueno, este dato no tiene mucho que ver, sino que demuestra que el comité valenciano está trabajando muy bien con la base, por lo que suben con mucha suficiencia a 2.ª B y llegan a la élite muy buenos árbitros. Ya podía el señor Miller Andrés preparar un dosier sobre su forma de trabajar para entregar dentro de 15 días en Logroño a sus colegas presidentes de comités territoriales. Que la Comisión de Coordinación Interterritorial no tiene por qué ser solo una reunión con el alcalde (o alcaldesa), una foto y una comilona.
2 comentarios:
Muy buen apunte César.
Munuera Alcorcón-Valladolid
Hernández Hernández la vuelta.
Suerte a ambos
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