Miércoles 11 de julio, 18:39 h. Abro la página del CTA para ver si había habido suerte y ya habían colgado los Movimientos y Situación de los Árbitros, cuando me encuentro un enlace llamado Clasificaciones 2006-07. No puede ser. Cierro los ojos. Los abro. Allí sigue el enlace, justo debajo del que me interesaba. Pincho sobre él para descargarlo y resulta que es un Excel. Uy, uy, uy. Una vez descargado, vuelvo a cerrar los ojos y a respirar profundamente. No puedo abrirlo. Decido abrir primero el documento Word con los ascensos y los descensos, lo leo, lo estudio, me sorprendo... O no. Después de unos cuantos minutos ya no tengo más información que sacar de este documento y, no hay más remedio, cliqueo sobre el Excel.
"Joder [siento el lenguaje, pero es lo primero que dije]... Undiano Mallenco". La exclamación no iba por el navarro, número 1 de la pasada temporada, sino porque eso signficaba que estaba ante la lista. No, perdón, ante La Lista.
Para un aficionado al fútbol, La Lista no significa nada, salvo unas líneas en el As diciendo lo manipulada que está por Sánchez Arminio y por Villar. Para un árbitro, no será entendible mi sensación al ver La Lista colgada en la web del CTA. Al fin y al cabo ellos solo tienen que pasarse por su comité y "comerle la oreja" a alguien para que se la enseñe. Sin embargo, para un aficionado al arbitraje que no es árbitro, ver La Lista, además de un sueño, es algo casi irrealizable.
Para mí, conseguir La Lista, es como para un filólogo encontrar un manuscrito del Lazarillo de Tormes. Más o menos. A través de los años y buscando mucho, pidiendo mucho, dándome contra muchos muros y puertas, he conseguido algunas Listas, apenas cuatro. Y son mi bien más preciado.
Este año, sin embargo, es el propio CTA el que las ha hecho públicas. No sé por qué y me gustaría saberlo algún día, pero por ahora La disfrutaré. No hay que olvidar, tampoco, la carta que envió el año pasado el CTA prohibiendo la divulgación pública de La Lista y agradeciendo, una por una, a todas las páginas web que, teniéndola, no la habían hecho pública. Había alguna página que no era citada y esa fue la culpable de que yo pudiera conocer la clasificación de la temporada. Aunque no le guste al CTA, gracias.
"Joder [siento el lenguaje, pero es lo primero que dije]... Undiano Mallenco". La exclamación no iba por el navarro, número 1 de la pasada temporada, sino porque eso signficaba que estaba ante la lista. No, perdón, ante La Lista.
Para un aficionado al fútbol, La Lista no significa nada, salvo unas líneas en el As diciendo lo manipulada que está por Sánchez Arminio y por Villar. Para un árbitro, no será entendible mi sensación al ver La Lista colgada en la web del CTA. Al fin y al cabo ellos solo tienen que pasarse por su comité y "comerle la oreja" a alguien para que se la enseñe. Sin embargo, para un aficionado al arbitraje que no es árbitro, ver La Lista, además de un sueño, es algo casi irrealizable.
Para mí, conseguir La Lista, es como para un filólogo encontrar un manuscrito del Lazarillo de Tormes. Más o menos. A través de los años y buscando mucho, pidiendo mucho, dándome contra muchos muros y puertas, he conseguido algunas Listas, apenas cuatro. Y son mi bien más preciado.
Este año, sin embargo, es el propio CTA el que las ha hecho públicas. No sé por qué y me gustaría saberlo algún día, pero por ahora La disfrutaré. No hay que olvidar, tampoco, la carta que envió el año pasado el CTA prohibiendo la divulgación pública de La Lista y agradeciendo, una por una, a todas las páginas web que, teniéndola, no la habían hecho pública. Había alguna página que no era citada y esa fue la culpable de que yo pudiera conocer la clasificación de la temporada. Aunque no le guste al CTA, gracias.
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